viernes, 31 de diciembre de 2021

Año nuevo


 



Entre los integrantes y las integrantas (Word subraya en rojo este adjetivo una vez hecho el intento de feminizarlo, que conste) de este numeroso y cada vez más reconocido Colectivo, tenemos siempre un diálogo muy fluido (virtual o presencial) que, según el momento o la ocasión, puede comenzar con pareceres técnicos/creativos específicos (pregúntenle, por ejemplo, a Irupé, nuestra ilustradora estrella, con qué meticulosidad tan lúdica emprende cada uno de sus trazos para realizar las imágenes inéditas que luego podemos disfrutar en este espacio) y que, más tarde o más temprano, cabalgan o deambulan o naufragan e incluso se zambullen, esos mismos pareceres, hacia y dentro de horizontes variopintos, mencionaremos entre ellos al Balance Anual que muchas y muchos comenzamos a realizar en septiembre y octubre, para luego poder tener un margen de algunos meses y así contar con la posibilidad de ajustar y mejorar lo que haga falta. Cada uno y cada una ya habrá hecho o estará haciendo ahora mismo su propia introspección, sintiendo si la balanza va a uno u otro lado, o si se bambolea hacia direcciones desconocidas, o si apenas se movió del mismo lugar en el que se encontraba el año anterior, algún budista podría añadir aquí que ese último es un estado ideal.

Bebiendo de las fuentes de nuestra ideología o idiosincrasia o sentir general, partiendo de las particularidades de cada uno y de cada una, con nuestras pequeñas, medianas o grandes diferencias (que suelen ser pequeñas) podemos decir que nos inclinamos hacia el optimismo y preferimos el crecimiento, aquí promovemos el mérito, el esfuerzo, la resiliencia y el éxito, confiamos en los emprendimientos y en la creación permanente de mundos paralelos e independientes, ya sean individuales o colectivos. Este año ,los datos los pueden ver aquí, hemos publicado mucho más y mejor que el año pasado, que también ha sido un gran año (en cuanto a lo creativo y a nuestra unidad) dentro de lo desastroso que pudo haber sido el 2020 por causas que son de global conocimiento. Hay publicaciones, en este blog de Los Verdes Platónicos y Paralelos, que reúnen miles y miles de lecturas. Nos sorprende ver el eco inmenso que luego van ganando en las redes sociales. Teniendo en cuenta, además, que utilizamos como base de difusión masiva una plataforma tan clásica y encantadora como un blog, ya mismo podemos alzar las copas y festejar.

 Somos muy sensibles y estamos muy atentos con lo que sucede a nuestro alrededor, es raro, muy raro que algún político o alguna política nos represente o merezca nuestro respeto, intentamos ir siempre por otro lado ya que el que aquellos susodichos proponen o gestionan (mal) nunca nos ha hecho conocer ningún puerto potable. Si nos representan, y también respetamos y queremos mucho, a grandes creadores, los de siempre, los nuevos, muchos y muchas de ellas también participan en nuestro proyecto. A todos ellas y a todos ellos y con todos ellos y con todas ellas, queremos desearles un Feliz Año Nuevo. Sabemos de antemano que el que viene puede resultar difícil, como todos los vividos hasta ahora, pero también confiamos (la utopía es parte de nuestra materia prima) en el futuro y en que el mundo que se avecina será muchísimo mejor.

Colectivo Cultural Los Verdes Platónicos y Paralelos

Editorial Oliverio

Editorial Sátira y Musa


viernes, 24 de diciembre de 2021

Navidad

El coro es maravilloso, solo hay que escucharlos. La letra (pergeñada o elaborada en Austria y hace más de 200 años por la dupla Gruber-Mohr) aún nos sigue conmoviendo. Honramos y respetamos al niño Jesús, aunque en esta trinchera intensa nos acordemos más seguido de Buda, a él le rendimos pleitesía. Dicho esto, es muy probable que esta noche y en muchas mesas no haya ni paz, ni amor, ni siquiera un plato de comida. Hablando de niños, de niñas y niñes, no hay que olvidar tampoco que solo en este bendito país alrededor del 55 por ciento de la población infantil (si, leyó bien, alrededor del 55 por ciento en el país de las riquezas naturales) la está pasando horriblemente mal y esta navidad y muy seguramente el año nuevo, no sean la excepción a esa desgracia, culpa total y absoluta de la politiquetería de turno. Nos acordaremos de todos ellos también, pero solo brindaremos por los primeros, los indefensos, deseando que las cosas se solucionen raudamente y sin más dilaciones. Así las cosas, también queremos brindar por los que tenemos el gran privilegio de contar con alimento y compañía. Ojalá, y esto casi seguro es un deseo utópico, en las próximas navidades haya Salud, Dinero y Amor para la Humanidad, Salud y Amor para todos los seres vivos del planeta.

 Colectivo Cultural Los Verdes Platónicos y Paralelos

 

Nuestro agradecimiento a Eve Carbó, integrante histórica de Los Verdes Platónicos, miembro (miembra) del coro que aparece aquí filmado, el domingo pasado

Video (inédito): Nicolás García Sáez 

 

jueves, 23 de diciembre de 2021

Burla

Un pájaro se burla de la noche y ríe desde su bastión verde. “Falta mucho para que salga el sol”, dicen los patios. Sonidos blancos se mojan en las sombras y callan. Obstinada, una risa precoz salta disparada hacia el este, llevando tras ella la estela aguda de ladridos insomnes.

 

Texto (inédito): Irupé Roch

Foto (inédita): Analía Saharrea

Especial para Los Verdes Paralelos y Los Verdes Platónicos

 

domingo, 19 de diciembre de 2021

Las cartas marcadas

Los lugares ya están ocupados, las hojas marcadas, al final de la sala una silla vacía, él te vio y no pudiste hablar, una frase que balbucea la interferencia del tiempo. Distraerlo no es fácil en su discontinuo movimiento. La clase aún no ha terminado, te quedás, él se va, qué episodio solitario dispara tu ausencia, aluvión de lava que vuela en cenizas, las gotas de sangre dibujan tu mantra y el agua las disuelve sin piedad. Se hizo muy tarde para salir, algo de sensatez permanece en un libro, la letra desprolija no se alcanza a leer.

 

Texto (inédito): Silvia Chaher

Foto (inédita): Analía Saharrea

Especial para Los Verdes Paralelos y Los Verdes Platónicos

 

sábado, 18 de diciembre de 2021

Dando el cante en Sinzigia

Abajo del peral de Sinzigia, bajo su sombra y sus frutos / por sobre sus raíces nos reunimos / y es que en Sinzigia se oculta, se transita o se eclipsa / todo puede ocurrir en ese mismo tiempo alineado / allí se dan las grandes revisiones para la conjunción.

No buscarás Sinzigia, no está marcado en el mapa / con Sinzigia se enlaza o no se enlaza ya que una conjunción, por subordinante, es impropia / solo la existencia de un rango inferior anula su función / venimos a cántaros rodados /así, como por decante /abro y me abanico de peras fulgurantes / de sustancias que corren a saludar

 

Texto y foto(inéditos): Ruth Moratilla Sanz

Especial para Los Verdes Paralelos y Los Verdes Platónicos

 

lunes, 13 de diciembre de 2021

Cortometraje Verde Platónico y Paralelo (versión diciembre)


  

Video y texto (inéditos): Nicolás García Sáez

Edición (inédita): Ximena Romero

Especial para Los Verdes Paralelos y Los Verdes Platónicos

 


sábado, 11 de diciembre de 2021

La clave final

Escribió aquella palabra en la primera página del cuaderno, sin saber que cambiaría el rumbo de mi vida. Descubrí el cuaderno por casualidad, mientras empacaba las pertenencias de la abuela Nora, que ya no está en este mundo. Y me apropié de él sin que mi padre lo supiera.

Heredé de ella el carácter, una mecedora y dos gatos, Panino y Salamito. La abuela era fanática de las “picadas”, esas costumbres humanas del siglo pasado. Hablando de tiempos lejanos, me contaba anécdotas sobre el olor del asado y cómo se le hacía agua la boca cuando su papá lo preparaba. Nunca llegué a probarlo, desde que nací comemos alimentos fabricados en casa con la impresora 3D. Las autoridades dicen que esto es lo más saludable y que los hidratos de carbono son la base de la pirámide alimenticia, lo vienen promocionando desde épocas remotas. Sin embargo, la población mundial es cada vez más joven. Las muertes repentinas están a la orden del día y de la noche. Nos vamos de forma abrupta y a nadie parece importarle.  A veces sospecho que es por la alimentación y otras veces por los brebajes que nos recomiendan y sugieren tomar. Dicen que son seguros y beneficiosos, pero no nos permiten conocer sus componentes. ¿Te das cuenta?, huele a Panino y Salamito encerrados.

La humanidad se fue transformando, las masas olvidaron hasta el mínimo raciocinio. Como alguna vez expresó Le Bon, en ellas se borra lo intelectual y predomina la credibilidad.

Mi abuela perdió a sus familiares y amigos. Intentó convencerlos, pero no hubo forma, ellos eran demasiado buenos e ingenuos. Nora también era buena, sin embargo estaba dotada de un elevado instinto de supervivencia, aunque esto no evitó que se sumiera en un pozo depresivo. Luego conoció a un grupo de personas, quienes la apoyaron y le enseñaron lo que escribiría en aquellas hojas que ahora me pertenecen. Sus seres amados no pudieron distinguir la realidad que danzaba, de la forma más descarada, delante de sus ojos. Y el primado negativo hizo gran parte del trabajo sucio.

Así fue como, poco a poco, nos convertimos en transhumanos. Las autoridades indicaban que esto mejoraría nuestras capacidades físicas y mentales. Llegaron los implantes, softwares, nanobots, modificaciones genéticas, bebés a la carta (mi generación es estéril) y mucho más, pero no quiero extenderme porque ese no es el punto. Lo que nunca informaron es que un tercio de la población sufriría lesiones en los ensayos experimentales de nuevas tecnologías. Y que sería el fin de la libertad, el desvanecimiento de la ética y la aniquilación del ser humano como se lo conocía.

Estamos todos conectados a una gran red. No hay secretos, nuestra mente es un libro abierto para quienes tienen el poder. Ellos son capaces de insertar pensamientos y sentimientos como les apetezca. El concepto de privacidad se esfumó. Los grupos humanos que se rebelaron fueron perseguidos, como pasó en la Edad Media. El mundo volvió a naufragar en la oscuridad.

Yo no tuve opción, me marcaron al nacer. Mis padres no fueron tan valientes como Nora, ellos bajaron la cabeza, pensando que eso les otorgaría una vida normal. Todo nos lleva a pensar que no tenemos escapatoria, pero sí la hay. Puedo comunicarme sin que lo capten, salir de la espiral del tiempo, escarbar en lo profundo y resonar. Tesla lo sabía, el Universo es energía, frecuencia y vibración. También Gariaev hizo su aporte con la genética de ondas.

La clave para evadir a la gran red está en el legado de mi abuela, en esa palabra escrita en su cuaderno. Y no hablo de cualquier cuaderno. Hablo de la bitácora de una oveja negra en el ocaso de la humanidad.

 

Cuento (inédito): Laura Chiavetta

Ilustración (inédita): Nicolás García Sáez

Especial para Los Verdes Paralelos y Los Verdes Platónicos

 

viernes, 10 de diciembre de 2021

Nuevos mundos

Para todos los amantes del cine más independiente (incluso independiente del ¨cine independiente¨) esta tarde, dentro de pocas horas (información en el flyer) podrán apreciar una muestra única y virtual en la que participa nuestra flamante Verde Paralela, Ximena Romero, probablemente una de las figuras más destacadas de ese cine que algunos y algunas hacemos o intentamos hacer a salto de mata, de manera autodidacta o en talleres que se van gestando cuando se atraviesa la neblina y la curiosidad hace acopio de entusiasmo, aquel que trasciende los vientos y las mareas y las infinitas dificultades que suelen aparecer cuando las cosas se hacen con nobleza, talento, sin dinero y al margen del mainstream o el gobierno de turno. Un click et voilá, allí se hacen mundos.

 

martes, 7 de diciembre de 2021

Besos viajeros


 Después de que la sudestada espantó garúas, anda el  crespón enamorando veredas, charcos, rincones, a mí. Deja caer un montón de hojas, se despoja atrevido: rojo, amarillo, ocre, naranja, surcan el aire fresco como besos viajeros.

 

Texto (inédito): Irupé Roch

Pintura (fragmento inédito): Nicolás García Sáez

Especial para Los Verdes Paralelos y Los Verdes Platónicos

jueves, 2 de diciembre de 2021

Esperanza

Un susurro de tus labios suspende enardecido el deseo de la noche. Las caricias anulan tristezas, melancólicos relieves y formas. El sonido se mete inmenso en su nota, se hace secreto el reloj del abismo y un relámpago de color colma las tormentas del pasado. Es la magia saliente, donde los amores flotan  en sueños ancestrales. Vendrá el farol con su abrigo y nacerá el encanto. Retornará la luna de los vientos y la estrella perdida recobrará su aliento.

 

Texto (inédito): Laura Chiavetta

Fotografía (inédita): Analía Saharrea

Especial para Los Verdes Paralelos y Los Verdes Platónicos