Indefensión de la mujer III. (Tema en el que repica una vez más la
señorita Dellapianetti, explicando a los restantes jurados -todos hombres-, que
hay tres niveles de comprensión femenina: el primer nivel -que todos creen
conocer-; el segundo -que es más comprometido y audaz-; y, por último, un
tercer nivel -del que nadie se atreve a hablar-. Apabullados ante tanta claridad
de conceptos e imbuidos del misterio que esa insinuación aportaba, se vota a
favor en relación también de cinco contra una abstención. (Ya harto
del tema, Bustos se plagia una vez más a sí mismo y presenta en esta última
fase: “Me los voy a reventar”)
Así se pasa al cuarto tema
a discutir en un abrir y cerrar de ojos.
Cuidado y alimentación. (La señorita Dellapianetti propone que el tema a tratar sea elegido por los mismos autores, en total libertad. Para colaborar, sin quitarle tiempo al tiempo, presenta ante los demás una lista en la que figuran todos y cada uno de los subtemas que deberían aprobarse en este delicado rubro: adiposidad, alopecia, ceguera, sordera, mutismo y homosexualidad latente o portante. Entre votaciones, la señorita Dellapianetti se convierte en un santiamén en amante, y, un tiempo después en la señora Dellapianetti de Dirckman, y cásase (dictado así por Bustos) con el que treinta y tres días más tarde sería el orondo padre de una niña que nadie imaginaba portadora de buenas noticias. El recuento de votos, influido quizás por el estado de “antojo prenatal” de la propulsora, logra cinco votos a favor y una sola abstención). Bustos, acuciado por las deudas, elige entre los subtemas el de la alopecia, proponiendo una más que posible cura real a esta calamidad que se ensañaba con los cueros cabelludos bonaerenses, e inscribe a nombre de Bienvenido Chao lo que hoy se considera ya como la incuestionable precursora del regae urbano: “Dos millones de peludos y Dieciocho millones de pelados”, que no es una solución descabellada ni mucho menos.
VOZ - Este invento ya está aquí,
CORO - Desde hace más de cien años,
VOZ-
Destapando, caños cloacas
CORO- Y
artefactos sanitarios
VOZ- Sin
embargo, se ha estanca
COROS- Por
intereses foráneos
VOZ-
Que han logrado que olvidemos
COROS-
Para que ha sido inventado.
(ESTRIBILLO)
COROS-
Chupa, chupa, la sopapa…
¡Cómo
chupa, la sopapa…!
Caspa,
mugre y ceborrea
Te la
saca para afuera
La
sopapa… pa…pa…pa
VOZ-
Crea vacío, dilata los poros…
COROS-
Estimula el bulbo piloso…
VOZ-
Separa el cuero del cráneo…
COROS-
Y, en un mes, te crece el pelo.
VOZ-
Sin champú, sin crema-enjuague
COROS-
Sin loción vigorizante,
VOZ- La
sopapa a toda hora,
COROS-
Y no hay calvicie que joda.
(ESTRIBILLO)
COROS-
Chupa, chupa, la sopapa…
¡Cómo
chupa, la sopapa…!
Caspa,
mugre y ceborrea
Te la saca
para afuera
La
sopapa… pa…pa…pa
VOZ- En
la ducha en la cocina
COROS-
En la calle, en la oficia
VOZ- En
la plaza o en la esquina
COROS-
¡¡¡“Use Sopapa Argentina”!!!
VOZ-
Diez pesos con veinticinco
COROS-
Precio más que razonable
VOZ- No
es oral, no es inyectable
COROS-
Es un masaje especial.
VOZ-
Que no te dan en la sauna
COROS-
Dulces geishas de Taiwan.
(ESTRIBILLO)
COROS-
Chupa chupa, la sopapa
¡Cómo
chupa la sopapa…!
Caspa,
mugre y ceborrea
Te la
saca para afuera
La
sopapa… pa…pa…pa
VOZ-
Otra sería la historia,
COROS-
Si a Sansón, estando en cana,
VOZ- se
le hubiera acontecido,
COROS-
inventar una sopapa.
VOZ-
Pero es invento argentino
COROS-
Y apareció con el siglo.
VOZ-
Por eso la historia es ésta…
CORO-
Una historia que ha dejado
¡Dos
millones, de peludos…!
¡Y
veintiocho millones de pelados…!
(FINAL A PURO HIMNO NACIONAL Y QUE DIOS Y LA
PATRIA NOS LO DEMANDEN)
“Dos
millones de peludos y veintiocho millones de pelados” Letra y Música de Bienvenido Chao
(A.C.B.). 1952.
*Nota del editor: Últimamente, en el núcleo
duro del Universo Verde Platónico y Paralelo, vienen vibrando muy, muy alto algunas
palabras, entre las que destaca aquella tan bella que reza ¨palimpsesto¨, y que,
por supuesto, también se escribe y se menciona sin comillas. El lector (atento
a esta maravillosa obra, intrépida, atrapante, desopilante, originalísima, clásica
& moderna, profunda, lúdica, genial y merecedora de adjetivos ad infinitum)
podrá apreciar aquí ciertos ecos que ya, en fragmentos, otrora fueron
publicados. Y usted está en lo cierto, mientras es menester destacar, claro, que
no es ni más ni menos que la quintaesencia del espíritu pirotécnico, abarcador
y siempre generoso del Gran Alberto Carlos Bustos, municipal y pájaro.
Desde Madrid, cuadragésima entrega. Texto y ficción (inéditos): Miguel Ángel Solá
Bocetito (inédito) a sus 6
años: Nicolás García Sáez
Especial para Los
Verdes Platónicos y Los Verdes Paralelos