ELLA SE MARCHA DEL PISO Y ÉL QUEDA
EN ESE INMENSO PÁRAMO DE DESOLACIÓN, ESPERÁNDOLA.
Un regusto a noche
entrecortada.
Oídos que no escuchan la
palabra que da ganas de vivir.
Donde ayer hubo tanto, cabe
menos.
Por momentos, algo más que
nada.
Es esta cicatriz entre
costillas la que habla.
Alimentándome el sopor.
Curvándote en mis manos.
Batiéndome en el pecho.
Jadeándome al oído.
Sembrando en mi cerebro porque
sí.
Sábanas, almohadas,
una manta, el cielorraso...
Y lo que fue. Y lo que no.
Y lo que podría.
Si yo hubiese... Si ella
hubiera...
Naderías, excusas, vil manía de
mis miedos.
Tres horas de entresueño entre
temblores y silencio.
Te busco, ojos cerrados, y esta
cama
desnuda la respuesta que no
quiero.
De a poco: labios besan aire,
manos tocan tela,
olfato que no sabe a que
atenerse...
Y un color soledad, o su vestigio,
me asemeja a otro hombre,
en otra noche, de otro
tiempo...
Y me desvela una vez más.
Y me duerme una vez menos.
Desde Madrid, trigésima tercera entrega. Texto y
ficción (inéditos): Miguel Ángel Solá
Dibujo y diseño (inédito): Nicolás García Sáez
Especial para Los Verdes Platónicos y Los
Verdes Paralelos